DUODÉCIMA CARTA A MAMÁ: DÍA DE LA MADRE

 

Querida Madre:

Este el primer año que celebramos el día de la madre con tu ausencia, es inicio de los días de las madres que tendremos que aprender a vivirlos solo con los recuerdos, que gracias al cielo los tenemos, que haríamos sin ellos?, es extraño, ahora ser de los huérfanos que añoran a sus madres, pero ni siquiera a eso creo tener derecho cuando veo a mis sobrinos que siendo más pequeños también tienen que pasar por ese trance, me lacera la tristeza, es que ningún hijo debiera quedarse sin sus madres, quién fue el tonto que diseño esto, nos unen a un cordón de vida del que nunca logramos separaros, hasta que un día nos arranca de pronto y sin anestesia, dejando una herida inmensa justo en nuestro  centro  de vid, nunca se es suficientemente grande para sobreponerse a ese momento en que se nos parte la vida para quedar rotos y andar descocidos para siempre.

Cuando en el colegio celebrábamos el día de las Madres, era tan normal ver a todas las Mamás asistir al homenaje y al final unirse con sus hijos, y al ver que algún compañero no tenía a su mamá cerca porque ya había partido a otros plano, era como triste pero normal, porque claro que en el mundo hay huérfanos, pero nadie sabe el verdadero significado de esa palabra hasta que los es y recién lo entiende. 

Entonces se solía presentar la típica canción se Leo dan "Todos tiene una Madre, ninguna como la mía! o la de Juan Gabriel "Como quisiera que tu vivieras" o la de Los Pimpinela "Madre, hoy te recuerdo más que nunca", pero todas esas presentaciones que lograban arrancar lágrimas en los ojos de muchas madres, eran tan distante a nosotros, y es que cuando tienes a tu Madre cerca te sientes y te crees inmortal, que tu madre será eterna, y todo puede ser normal pero tu no  necesitarás de esa letra melodramáticas con las que todos lloran, hasta que llega el día en que todo cambia y ahora cada letra de esas mismas canciones que antes solo eran números artísticos, hoy cala en los más profundo de tu alma, para hacerla tirones y estrujar hasta dejarla como un papel arrugado y envejecido, cansado de tanta arruga que ya no se borra.

Realmente la orfandad es el estado más antinatural de toda la creación, no sé quien sea el responsable  si aquel llamado Dios, o el Universo o lo que fuera, si le viera a la cara le diría que se equivocó y le obligaría a rectificarse, las Madres no deben morir o si lo hacen deben hacerlo con su hijos, es imperdonable separarlos, no tiene sentido una Madre sin su hijo, como un hijo sin su madre.

Creo que por eso decidí jamás ser Madre, no merece el universo seguir sembrándose más dolor de que ya existe en el mundo por este error de quien sabe quién y por todos lo otros  cometidos por eso hijos que no parecen haber nacido de Madre.

Pero tu mi querida y siempre sabia Madre, lo tenías todo muy pensado, te fuiste pero te quedaste, aun

flota tu aroma en la habitación, y tu dulces voz pronunciando mi nombre la escucho cada mañana como una oración santa, y mi día se ilumina estas tan cerca, me acompañas todo el tiempo, con tu mirada en mi entrecejo, y cuando quieres asomarte solo tengo que mirar a cielo y ahí te encuentro, más si acaso osas abrazarme son los sueños el lugar de nuestro encuentro, hemos aprendido una nueva forma de conectarnos y es que las Madres nunca mueren y si se van siempre se quedan, gracias por todos tus recuerdos esa vida día a día que me regalaste, y por enseñarme esta nueva forma de vivir contigo aunque nadie lo entienda, gracias por quedarte tan cerca aun estando lejos.

MOMENTOS  ＜3